jueves, 22 de marzo de 2012

SOMOS UN PAÍS DE COÑA,

No sé que me indigna más. Ser español o la complacencia de los españoles en general. Hay mil argumentos distintos con los que defender estas dos ideas pero en este artículo de opinión voy a tratar de imaginarme como nos deben de ver desde fuera.
En este país de coña, entidades como los clubes de fútbol deben más de 750 millones de euros a la hacienda pública? De acuerdo que entretienen, incluso a veces dan alguna alegría, pero como decía el impresentable presidente del Bayern de Múnich, Uli Hoeness “…Para mí es el colmo, es impensable. Pagamos cientos de millones de euros para que salgan de la mierda y luego los clubes no pagan sus deudas. No puede ser…” en referencia a “las ayudas” a nuestro país para que salgamos de “nuestro hoyo” y acabemos comprando “sus mierdas alemanas”. Desgraciadamente para nosotros el Sr. Hoeness tiene un punto de razón y los productos alemanes, por lo general, no son ninguna mierda. Pero bueno, también es cierto que nuestros equipos de fútbol más competitivos, incluyendo la selección española, tienen economías relativamente saneadas. Con la deuda de los equipos de fútbol se podían construir 2 hospitales… o 125 km de autopistas… o 150 colegios… o dar más de 25.000 becas Erasmus.  

En este país de coña, he descubierto que aun hay pendientes de liquidar empresas como “Barcelona Holding Olímpico” cuya misión era “…el control de la ejecución de las obras de infraestructura y equipamiento vinculadas a la celebración de los juegos olímpicos de Barcelona 1992.”, empresas cuya misión acabó al finalizar las obras, es decir, antes de que empezaran los juegos, y que en 20 años no han tenido tiempo suficiente de gestionar su liquidación. Eso sí, manteniendo sus cargos ejecutivos y consejo de administración.

En este país de coña, un ex juez de la Audiencia Nacional se permite que un Banco, contra el que había una querella interpuesta y que casualmente cayó en su juzgado, le financie cursos en Nueva York (Ni que decir tiene que la causa quedo archivada por el juez subvencionado). El mismo juez inicia un procedimiento contra las víctimas del franquismo (y supongo que del republicanismo también) que ha costado cientos de miles de euros al contribuyente para que finalmente le declaren “no competente” y así desgraciadamente no poder condenar a los asesinos que salvo alguna excepción, llevan muertos décadas. Menudo alivio para ellos que estaban que no descansaban bien dentro de sus tumbas.

En este país de coña, alguien que tiene la fortuna de ser hijo de una importante familia, además de deportista de elite reconocido, y esposo de una Infanta de España, se ve involucrado en turbios negocios que cuando menos “no parecen ejemplares”. No alcanzo a imaginar la vergüenza que debe sentir S.M. el Rey que desde luego no se merece los yernos que ha tenido y tiene. Y si además se demuestra la autoría de los hechos, la Infanta de España debería de plantearse muy seriamente la renuncia a su condición real, o la separación matrimonial, por el flaco favor que su esposo ha hecho a la monarquía como institución de este país (declaradamente “juancarlista” que no monárquico, no nos equivoquemos). Aunque lo mejor sería que decidiera hacer las dos cosas.

En este país de coña, un ex Director General de Trabajo de una comunidad autónoma puede discrecionalmente otorgar 1.3 millones de euros a su chofer y este agradecido invitarle a cocaína y otros detalles lo que le suponen unos gastos mensuales de unos 25000 euros. El mismo Director General reparte 3 millones de euros a conocidos y paga hasta 456 millones de euros en 7 años en informes a diversas empresas sin ningún tipo de explicación ni documento. El dinero de la cocaína, no imagino cómo se puede recuperar, pero… ¿Y el resto del dinero?

En este país de coña, hay un total de 8.112 alcaldes, 65.896 concejales, 1.206 parlamentarios autonómicos, 1.031 diputados provinciales, 650 diputados y senadores, 139 responsables de Cabildos y Consejos insulares y 13 consejeros del Valle de Arán. A los que hay que añadir asistentes, asesores, secretario/as, administrativos, ayudantes y demás personal nombrado por libre designación y que suman un autentico ejército de varios miles. Podemos descubrir un municipio de 11.500 habitantes (Valdemorillo - Madrid) que debido a los pactos post-electorales, se permite tener una alcaldesa (PP) y una vicealcaldesa (PIVALDE) a 69.000 Euros/año cada una. ¿Cómo es posible que el sueldo de los cargos públicos lo fijen los propios cargos públicos?

En este país de coña, un ciudadano es un señor normal hasta que es elegido para un cargo público, después de estar chupando del bote 7 años y al dejar el puesto, no vuelve a ser lo que era, un señor normal. Sino que se convierte en un privilegiado con una pensión vitalicia superior en mucho a la que pueda percibir del estado un ciudadano ejemplar por mucho que este haya cotizado. Este político pre-jubilado no necesita trabajar para el resto de su vida. Aunque al tratarse de un autentico adicto al trabajo, siempre puede encontrar un empleo con el que rellenar sus horas muertas (digamos por ejemplo en el Consejo de Estado), donde cobrara mas y hará lo mismo… es decir, nada.

En este país de coña, un sindicalista protegiendo los intereses de los trabajadores puede cobrar más de 210.000 euros anuales entre sueldo y dietas, además de usar relojes de 6000 euros. Tampoco es difícil que esto pase ya que los sindicatos viven de las cuotas de sus afiliados (en CCOO por ejemplo 118 millones de euros anuales) y de las subvenciones para financiar la acción sindical (CCOO 6.3 millones), la formación y participación en los órganos consultivos del ministerio de Trabajo, sus organismos autónomos y las entidades de la Seguridad Social (CCOO 1 millón), etc. En total más de 204 millones de euros en ayudas a varios sindicatos. Otros como la CNT no reciben dinero de ningún fondo público, todo hay que decirlo.

En este país de coña, la Directora General de una Caja de ahorros, a la que ha llevado a la quiebra técnica falseando informes y manipulando datos, se auto asigna una pensión vitalicia de 370.000 Euros anuales y tras su cese, se permite poner una denuncia por despido improcedente. Por cierto ¿Quién la puso ahí?

En este país de coña, hasta 3 ex presidentes de Comunidades Autónomas, 2 ex vicepresidentes del gobierno y varios ex ministros, pueden tener abiertas diversas causas por tráfico de influencias, corrupción,  malversación de fondos públicos, etc. No se preocupen, una vez dictada sentencia y si esta es de culpabilidad, a parte de la inhabilitación para cargo público, si es absolutamente necesario, se le expulsa del partido (para que aprenda…). Así se les puede ver, llorando desconsoladamente por tan dura sanción. Especialmente la del partido. ¿Ir a la cárcel… estas de coña?

En este país de coña, Los partidos políticos reciben 84,4 millones de euros (Otros que viven de las cuotas de sus afiliados), la Casa Real 8,9 millones y la Iglesia Católica (sin reconocimiento constitucional en un Estado Laico) 252 millones. Las asociaciones juveniles 7,8 millones. La Federación Española de Futbol 4,8 millones. Las empresas privadas de prensa escrita y televisiones privadas 360 millones. El Cine Español 89,6 millones. El personal religioso que trabajan en instituciones públicas como hospitales, cárceles y ejército 15 millones. Los profesores de religión 600 millones. Los toros 564 millones, etc. ¿Pero hay alguien en este país que no reciba de una u otra manera dinero del estado? En vez de buscar competitividad, eficiencia y servicio al ciudadano. Lo que se busca es la subvención a toda costa. Esto es muy sencillo, lo que no se mantenga por sí mismo y que no tenga algún valor Histórico o artístico relevante avalado por un organismo cualificado, se cierra y a otra cosa. Lo demás es mantenerlo con el dinero público.

En este país de coña, he descubierto un pueblo de 252 habitantes (Aguilar de Segarra  - Barcelona) con una deuda a 31 de diciembre de 2010 de unos 2.300.000 Euros, más de 9000 euros por habitante. No es de extrañar si Cataluña alcanza 41.778 millones de euros de deuda pública y el estado 734.961 millones de euros. ¿Me van a decir a mí que NADIE, ABSOLUTAMENTE NADIE se ha dado cuenta hasta ahora de que el sistema de control del dinero público no funciona? Y aun hay mas, los que nos condicionan o pretenden condicionar nuestra política económica están aun peor que nosotros. Si España tiene una deuda pública 14.498€/Hab, Alemania la tiene de 23.343€, EEUU de 32.973€ o Japón de 78.278€. ¿Cómo es posible que las políticas económicas de los estados soberanos estén a capricho de las tendencias económicas que marcan los capitales privados en los mercados? ¿O de las opiniones de agencias privadas de calificación auspiciadas por oscuros intereses más allá de los propios de sus clientes?

Definitivamente ESTE ES UN PAÍS DE COÑA. Afortunadamente todo va saliendo a la luz. Tanto se quiere robar que la avaricia acaba por romper el saco. Pero menos mal que la justicia en general y el ministerio fiscal en particular actúan de oficio, porque si de los españoles y su ánimo dependiera, todo esto caería en el olvido. Aunque me ofenda en un primer momento, no me extraña que España ocupe el puesto 31 de 182 en corrupción, un par de puestos por delante de Botswana. Justo entre Chipre y Taiwán. Lo que aun nadie me ha explicado es porque en este país, si eres cargo público, puedes gastar dinero público aun sin tenerlo. Donde está el dinero que se han llevado estos chorizos, por qué no lo devuelven y por qué no se exigen responsabilidades penales a los gestores de fondos públicos que han obrado delictiva o irresponsablemente.